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El último número impreso de CARETAS informó sobre los problemas que enfrentaba el proyecto político liderado por el empresario Carlos Añaños en el partido Perú Moderno. La indecisión del fundador de Ajeper sobre su candidatura presidencial se evidenció en sus recientes conversaciones con el alcalde de Surco, Carlos Bruce, quien recientemente renunció a Avanza País. La idea era inscribir a Bruce en Perú Moderno para que él, el alcalde de los distritos de Lima con mayor aceptación, fuera candidato a la alcaldía de Lima Metropolitana, mientras que Añaños se postularía a la Presidencia de la República.
Después del prelanzamiento que tuvo lugar en junio, Añaños (58) mantuvo un perfil bajo, siguiendo el consejo de su asesor brasileño Eduardo Fischer. La estrategia era mantener la discreción en los medios hasta principios del próximo año, pero los acontecimientos se han precipitado en los últimos días.
Fuentes relacionadas con las negociaciones revelan que Añaños, a través de su colaborador Pedro Cachay (ex apoderado del Grupo AJE), habría anunciado su ruptura con Perú Moderno, el partido fundado por Wilson Aragón, dueño de la empresa Santa Catalina que produce las famosas “frazadas tigre”. Esto dejaría a Añaños fuera de la contienda.
La situación se habría definido por dos factores: la falta de compromiso de Añaños con el financiamiento de la organización y la campaña, y el papel de la exprocuradora Julia Príncipe, presentada por Añaños como su principal colaboradora. En la página web de Perú Moderno solo se destacan tres líderes: Añaños, Príncipe y Aragón.
¿Qué ocurrió? Aragón habría propuesto que dos de sus colaboradores se encargaran de la selección de candidaturas, propuesta que no fue aceptada por Príncipe, designada por Añaños como la encargada de filtrar todas esas tareas. Personas familiarizadas con el proceso de organización destacaron las limitaciones de Príncipe para liderarlo.
La semana pasada, Añaños pareció referirse a los problemas con Perú Moderno en un mensaje en sus redes sociales: “Cuando emprendes hay momentos de CRISIS, pero se sale adelante con liderazgo y hablando con transparencia”, destacó.
Este desenlace precoz tendría consecuencias inmediatas en el ajedrez político peruano. En julio se inscribieron en sus respectivos partidos quienes aspiran a ser candidatos a la presidencia y al Congreso. El plazo de inscripción para aquellos que desean postularse en las elecciones municipales y regionales vence el próximo 7 de octubre. Muchos personajes tienen tres semanas para definir su futuro político inmediato.