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MADRID, 25 de junio (EUROPA PRESS) –
El Gobierno mexicano ha especificado este martes que han sido doce los candidatos oficialmente registrados que fueron asesinados durante la campaña electoral de las pasadas elecciones generales, en las que estaban en juego más de 20,000 cargos, a pesar de que informes periodísticos habían elevado la cifra a alrededor de treinta.
Así lo confirmó la ministra de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, quien precisó que la cifra corresponde a aquellos aspirantes que habían inscrito oficialmente sus candidaturas en los institutos electorales.
Rodríguez Velázquez lamentó estas muertes y al mismo tiempo criticó “el interés” de algunos grupos opositores por crear “alarma”, así como “la idea equivocada de que México vivió el proceso electoral más violento” de su historia reciente. “Pero esto no es así”, recalcó.
“Se trata de campañas que pretenden desacreditar al Gobierno”, denunció la ministra, quien resaltó que a todos los candidatos que solicitaron protección se les concedió, incluso habiendo algunos que rechazaron la propuesta de las autoridades para reforzar su seguridad.
“Se recibieron 645 solicitudes de protección, de las cuales se atendieron 595 y 50 fueron declinadas por los solicitantes. Todos los candidatos que la solicitaron tuvieron seguridad y la mantendrán hasta que asuman sus cargos. Hasta la fecha, 121 de ellos cuentan con protección, los demás la rechazaron”, explicó.
Rodríguez Velázquez destacó el trabajo “muy cuidadoso” de las autoridades y la fuerza pública durante la campaña, señalando que a diferencia de otros procesos electorales, en esta ocasión no hubo homicidios de aspirantes a cargos federales ni de líderes estatales.
El pasado 2 de junio, México celebró las que han sido las elecciones más grandes de su historia reciente, con casi cien millones de electores para elegir más de 20,000 cargos, incluida la presidencia, que ganó la propuesta presentada por Morena, Claudia Sheinbaum, convirtiéndose así en la primera presidenta del país.
A pesar de los tres meses de campaña marcados por la violencia, que afectó principalmente a las propuestas en áreas locales y poblaciones pequeñas, donde la presencia del Estado sigue siendo difusa debido al poder que mantienen de manera sistemática el crimen organizado y los cárteles.
A pesar de las cifras, con la prensa mencionando cerca de 30 candidatos asesinados, el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, destacó que los niveles de violencia fueron menores en comparación con años anteriores, criticando el “sensacionalismo” de algunos medios sobre el tema.