1
MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) –
Miles de personas se han manifestado este sábado en diversas ciudades de Francia para expresar su solidaridad con las víctimas de violación y, en particular, con Gisèle Pelicot. Hoy se cumplen diez días del juicio contra su esposo, acusado de drogarla y permitir que otros 50 hombres la violaran mientras él grababa videos durante una década.
La concentración más significativa ha tenido lugar en la Plaza de la República de París, donde se han coreado consignas como “Todas somos Gisèle”, “Te vemos como un violador, te creemos como una víctima” y “No estás sola”.
Otras ciudades importantes como Marsella, Lyon o Rennes también han sido escenario de protestas. Según la Fondation des Femmes (Fundación de Mujeres), uno de los movimientos convocantes de las manifestaciones, se llevaron a cabo encuentros en más de treinta localidades de todo el país, incluida Aviñón, donde se está desarrollando el juicio contra Dominique Pelicot y los 50 hombres acusados de violar a Gisèle.
Junto con otras organizaciones feministas y el movimiento ‘Me too’, el colectivo ha llamado a la movilización “que parta del calvario de Gisèle Pelicot, pero que no se limite a él”.
En un artículo publicado el jueves en el diario ‘Libération’, el colectivo afirma que “nos equivocamos al llamar a este juicio el ‘caso Mazan’ o incluso el ‘caso Pelicot’. Es ante todo el ‘caso de los 72 violadores”, debido a que “cada mujer podría reconocer un rostro que le traiga un recuerdo traumático entre la multitud de hombres acusados en Mazan”.
Apela a los hombres a “levantarse con nosotras, a dejar de ser pasivos en el mejor de los casos, y cómplices en el peor”. “No todos los hombres”, escuchamos una y otra vez después de cada feminicidio y violación, pero ¿cuándo veremos acciones concretas para cambiar las cosas más allá de estas palabras que ocultan los hechos bajo la alfombra?”, se pregunta.
La asociación también exige una ley integral contra la violencia sexual que ponga fin a la “alarmante” tasa de desestimación de denuncias por violación en Francia, que alcanzó el 94 por ciento en 2020.
El caso de Gisèle Pelicot ha conmocionado a la sociedad francesa, tras saber que fue víctima de al menos 92 violaciones organizadas por su propio esposo durante una década. Él habría suministrado a su esposa ansiolíticos sin su consentimiento para mantenerla inconsciente durante las agresiones, en las que participaron al menos otros 50 hombres reclutados por él a través de Internet.