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MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) –
La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha alertado este domingo de que la situación en los hospitales del centro de la Franja de Gaza es de “auténtica pesadilla” después de los bombardeos y operaciones militares terrestres israelíes en la zona de Nuseirat que se han cobrado la vida de al menos 274 personas.
“Los quirófanos están trabajando al máximo. Contamos con recursos muy limitados”, ha declarado Chris Hook, jefe del equipo médico de MSF en el Hospital Nasser. “En la última hora, recibimos alrededor de 50 heridos graves. Hay personas con múltiples y graves fracturas abiertas en sus extremidades. Tenemos varios niños inconscientes a los que estamos tratando de cuidar a través de tomografías computarizadas y cuidados intensivos”, explicó.
Entre los heridos se encuentran algunos con quemaduras graves y al menos cuatro personas que han necesitado la inserción de tubos torácicos debido a lesiones graves en el pecho.
“Contamos con pocos analgésicos disponibles. Tenemos que racionar la morfina y la ketamina. La unidad de cuidados intensivos está llena y los pacientes siguen llegando. Es un suceso grave con víctimas en masa que está ocurriendo en este momento”, detalló.
La situación en el Hospital Al Aqsa es similar, con “un abrumador número de pacientes gravemente heridos”, muchos de ellos mujeres y niños.
“La situación en Al Aqsa es una auténtica pesadilla. Ha habido un gran número de muertes debido a los bombardeos en zonas densamente pobladas. Es mucho más de lo que cualquier hospital podría atender de forma funcional y apenas contamos con recursos”, señaló Samuel Johann, coordinador de MSF en Gaza. “¿Cuántos hombres, mujeres y niños más tienen que morir para que los líderes mundiales decidan poner fin a esta masacre?”, agregó Johann.
“CAOS TOTAL”
“Era, como siempre, un caos, pero agravado en comparación con los últimos cuatro días”, describió Karin Huster, responsable médica de MSF en el Hospital Al Aqsa. “Un caos total en el interior. Toda la sala de urgencias (…) estaba abarrotada de pacientes en el suelo provenientes de los bombardeos en Nuseirat”, agregó.
El lugar estaba desbordado, pero se realizó un trabajo increíble. “Las enfermeras del hospital, los compañeros de Médicos Sin Fronteras, las enfermeras y médicos que nos ayudaron; todos realizaron un trabajo increíble y siguen haciéndolo en este momento”, destacó.
Huster explicó que había “todo tipo de heridas de guerra”: heridas traumáticas, desde amputaciones hasta evisceraciones, traumatismos, lesiones cerebrales traumáticas, fracturas, quemaduras graves, etc. “Niños completamente grises o blancos por el shock, quemados, llamando a sus padres desesperadamente, muchos en estado de shock sin poder gritar, mujeres embarazadas”, relató.
“No hay absolutamente nada que justifique lo que he visto hoy. Nada. Estos niños: el de tres meses, el de siete años, el de 12 que murió, el hombre de 25 años, la mujer de 78, todos con heridas espantosas. ¿Merecen esto? ¿Por qué el mundo sigue mirando en silencio? ¿Cuál es el nivel de horror que debemos alcanzar antes de actuar, antes de decirle a Israel de una vez por todas que esto no es aceptable?”, concluyó.
