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MADRID, 4 de septiembre (EUROPA PRESS) –
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha reiterado su concepto de mantener al Ejército en el corredor de Filadelfia, ya que es la única opción para alcanzar los objetivos de la guerra. “Salir de ahí no traerá a los rehenes a casa”, afirmó en una conferencia de prensa para medios extranjeros.
“Si queremos traer de vuelta a los rehenes, debemos controlar el corredor de Filadelfia”, dijo el primer ministro Netanyahu, quien aseguró que esta área ha sido utilizada durante años como una ruta de contrabando de armas provenientes de Irán, ante la inacción de las autoridades egipcias.
“Cuando nuestro Ejército abandonó Gaza en 2005, el corredor de Filadelfia se convirtió en una zona de contrabando de armas suministradas por Irán”, destacó, subrayando que la derrota de Hamás ahora y en el futuro, así como la liberación de los rehenes, depende de mantener bajo control esta zona.
Netanyahu resaltó que la ubicación del corredor de Filadelfia fue crucial para que Hamás se rearmara antes de los ataques del 7 de octubre, y advirtió que, de no controlarse, podría utilizarse también para sacar clandestinamente a los rehenes hacia Irán e incluso Yemen.
“Si abandonamos el corredor de Filadelfia, no podremos regresar. Salimos de Líbano hace 24 años y nos dijeron que podríamos volver si nos disparaban misiles, pero no pudimos debido a la presión internacional”, reprochó.
“No abandonaremos el corredor de Filadelfia, ni siquiera durante el período de 42 días incluido en la propuesta de acuerdo de intercambio. No queremos salir de Gaza y luego tener que regresar. Más bien queremos quedarnos. Estoy comprometido a devolver a los rehenes, pero salir de Filadelfia no logrará ese objetivo”, remarcó.
Netanyahu criticó que la comunidad internacional pretendiera que Israel cediera justo la misma semana en que “Hamás mató a sangre fría a seis rehenes” e insistió en que solo la presión militar podría traer de regreso al resto de personas que aún están cautivas del grupo palestino.
Netanyahu aseguró que Hamás accedió a liberar a algunas de estas personas después de tomar el control del corredor de Filadelfia y atacar Rafá. Sin embargo, no ha habido ningún acuerdo para liberar rehenes desde noviembre, mucho antes de la operación a gran escala en mayo en esa ciudad.
ATAQUES A LA PRENSA EXTRANJERA
En respuesta a la prensa, Netanyahu se mantuvo firme ante las preguntas que hacían referencia al sufrimiento de las víctimas y de aquellos que continúan teniendo a sus seres queridos en cautiverio. “La responsabilidad de los líderes no es solo compartir el sentimiento y la emoción, sino también ejercer el juicio correcto”, expresó.
También respondió a las críticas del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien esta semana le reprochó por no estar haciendo lo suficiente para lograr un acuerdo con Hamás. “Yo dirigiría la presión y la ira a donde corresponde, hacia quienes mantienen a los rehenes en mazmorras y cometen masacres”, sugirió.
Asimismo, acusó a la prensa extranjera de exagerar la crisis humanitaria en la Franja de Gaza y afirmó que las informaciones sobre numerosas bajas civiles durante el asalto a Rafá eran “erróneas”.
“Sean honestos”, demandó Netanyahu, quien protestó por las “acusaciones escandalosamente falsas” que la prensa ha hecho contra su Gobierno y las Fuerzas Armadas israelíes. “No voy a cambiar mis políticas humanitarias, de vacunación y de combate para minimizar las bajas civiles”, concluyó.
