17
MADRID, 31 de mayo. (EUROPA PRESS) –
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este viernes que la condena en su contra por manipular libros de cuentas para pagar a la actriz de cine para adultos Stephanie Clifford es el resultado de un “fraudulento” juicio, organizado por orden de la Casa Blanca, y defendió que esta manipulación es un “gasto legal” sin importancia significativa.
Después de cuestionar en numerosas ocasiones la imparcialidad del juez que llevó el caso, Juan Merchan, el ex presidente aseguró que está en el centro de un complot orquestado desde Washington del cual no puede expresarse completamente debido a una “sucia” orden de silencio.
Durante su comparecencia en la Torre Trump de Nueva York, Trump aseguró que el juicio no ha afectado en absoluto sus posibilidades de cara a las elecciones de noviembre, donde aún se ve como el “principal favorito”, a pesar de las presiones “fascistas” de la Casa Blanca y personas cercanas al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aunque expresó dudas sobre la capacidad de su sucesor porque “no entiende nada”.
Respecto a la condena del jueves, Trump insistió en que simplemente “pagó un gasto legal a un abogado, y según los expertos legales lo incluyeron así en los libros de cuentas”, y denunció cómo, a lo largo del proceso, ha observado en silencio la “crucifixión” de varios testigos a su favor con la aprobación de un juez que “por fuera parece un ángel, pero por dentro es un demonio”.
En su opinión, los pagos a Clifford no fueron “dinero para un silencio”, sino que la actriz firmó un Acuerdo de No Divulgación sobre sus supuestas relaciones sexuales. “Y eso es algo perfectamente legal”, señaló.
Además, el presidente reiteró que siempre ha querido testificar pero no lo ha hecho por recomendación de sus abogados. “El perjurio me era indiferente. No me importa exponerme porque hay cosas que se deben hacer por este país. Esto es más grande que Trump, más grande que mi Presidencia”, dijo.